Postparto: ¿Un duelo mal entendido?

El postparto no es un camino de rosas, durante nueve meses te preparas para el momento en el que tendrás a tu hijo en brazos, pero realmente es más una ensoñación sobre ese momento, porque nadie te prepara para lo que va a venir ni tampoco nadie te cuenta que vas a sentir…

Por mi experiencia diría que el verdadero postparto comienza cuando llegas a casa, los días en el hospital fueron como una especie de vacaciones, sin duda tienes dolores y estás cansada, pero es una verdadera zona de confort de la maternidad. Estás cuidada, tranquila y confiada, tienes asistencia 24 horas 7 días a la semana y puedes dedicar el 100% del tiempo al nuevo miembro de la familia… Recuerdo que con mi hija mayor pedí literalmente a las matronas que si podía quedarme algún día más, me daba miedo llegar a casa con mi pequeña y toda la seguridad que tuve durante el embarazo se esfumó en segundos.

Si el embarazo es una montaña rusa de hormonas, el postparto no es muy diferente… Las hormonas que se encuentran presentes en tu cuerpo sufren un descenso muy grande en tan solo 24 horas, han sido nueve meses conviviendo con ellas y tu cuerpo tiene que acostumbrarse a los niveles hormonales de antes del embarazo y hasta que se alcanza esa regulación hormonal es muy común sentirse triste, irritada, abrumada, apática… Si a este hecho, además le sumamos los grandes cambios que experimenta tu vida con la llegada de un bebé es muy normal que sintamos lo que los médicos denominan «tristeza postparto».

Este sentimiento angustia mucho cuando acabas de convertirte en madre, porque todo lo que percibes a tu alrededor es felicidad plena y comienzas a cuestionarte si es normal lo que estás sintiendo, si eres buena madre, si vas a ser capaz de hacerlo bien, si estás preparada para afrontar la maternidad… En definitiva comienzas a cargar la mochila con dudas, miedos e incertidumbre que, para que te voy a engañar, nos van a acompañar durante toda la crianza de nuestros hijos.

El postparto es un duelo, visto desde su acepción de la pérdida. En el momento del alumbramiento toda mujer sufre la «pérdida» del feto de su vientre, otra cosa es que esa «pérdida» se ve envuelta en un momento de gran felicidad al ver por mi primera vez y conocer a nuestro hijo. Durante nueve meses has experimentado como tu hijo crecía dentro de ti, le has sentido, habéis convivido durante 24 horas juntos, y en unas pocas horas todo eso desaparece y es muy normal sentir un vacío dentro, sentirse extraña y tener sentimientos enfrentados ante la situación que estamos viviendo.

En numerosas ocasiones el entorno no ayuda a que estas situaciones fluyan con normalidad y pueda vivirse ese proceso de «duelo» con la mayor naturalidad y sin mayores complicaciones. Ninguno de mis dos partos fueron como yo esperaba, y recuerdo como no podía verbalizar con mi entorno lo que había vivido porque lo importante es que ya había pasado y que tanto mis hijos como yo estábamos bien…

Con mi hija mayor llore a mares durante su primer mes de vida, no me sucedía nada concreto pero había determinados momentos en los que la miraba y rompía a llorar, tenía miedos y muchas dudas sobre si sería buena madre, y sobre todo recuerdo que tenía pánico a no poder cubrir sus necesidades. Por el contrario, con mi hijo pequeño no lloré casi, pero en cambio si recuerdo un nudo en la garganta durante más de tres meses, en este caso era más la culpa por no estar haciendo las cosas exactamente igual que con su hermana mayor, además de las dudas y los miedos sobre ser capaz de ser bimadre…

En el momento en el que te conviertes en madre eres consciente de que nunca volverás a ser la misma persona y tenemos que darnos tiempo para procesar esa nueva situación. Si hemos estado nueve meses para crear vida ¿cómo no vamos a dar unos meses a nuestro cuerpo para volver a adaptarse y a regular todo lo que ha procesado durante ese tiempo?

En ocasiones la tristeza «normal» que se siente durante el postparto pasa a ser algo más y es importante que tanto nosotras como nuestros entorno sepamos identificarlo y si lo creemos necesario pedir ayuda, en el post ¿Tristeza o depresión postparto? Cómo saber cuando necesito ayuda podréis encontrar información sobre este tema.

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