La comunicación no verbal es todo aquello que expresamos sin decir ninguna palabra. Nuestro cuerpo, nuestras expresiones, el tono de nuestra voz… también comunica mucho. En ocasiones esa forma de expresarnos es mucho más poderosa que las palabras que decimos. Los niños son grandes observadores y perciben mucho más lo que hacemos que lo que decimos. ¿Cuántas veces has escuchado o has dicho?: «Haz lo que yo digo y no lo que yo hago». Nuestros hijos aprenden por imitación, no importa cuantas veces le digas las cosas que si nuestros actos contradicen nuestras palabras será muy complicado el aprendizaje…
La comunicación no verbal es capaz de transmitir nuestro estado de ánimo. Si nuestro cuerpo transmite enfado, nerviosismo, desconfianza… de poco sirven las palabras. Como decimos los niños son unos maestros de la observación y por eso es importante que cuidemos lo que les decimos y el cómo se lo decimos. Nuestra actitud y lo que transmitimos con nuestro cuerpo debe ir en sintonía con lo que expresan nuestras palabras. De hecho es importante que reforcemos nuestras palabras con nuestra comunicación no verbal para que nuestros hijos interpreten mejor nuestros mensajes.
Elementos de la comunicación no verbal
Vamos a repasar algunos de los elementos que debemos tener presentes y que son importantes para que nuestro mensaje tenga coherencia entre lo que decimos y lo que transmitimos 😉
- La expresión facial: Ya lo dicen, que la cara es el espejo del alma… Si tu estás diciendo a tu hijo que no pasa nada pero lo haces con el ceño fruncido no confiará en tus palabras.
- Los gestos: Nuestra actitud a la hora de hablar marcará el significado de lo que queremos decir.
- La postura: Como tengamos colocado nuestro cuerpo puede transmitir mucho, desde amenaza hasta tranquilidad, en función de que postura adoptemos ante la otra persona.
- La distancia: No es lo mismo que estemos hablando separados que si nos acercamos y nos ponemos a la altura de nuestro hijo. El mensaje que trasmitimos con la proximidad es de exclusividad.
- El tono: La modulación del tono con el que hablemos es muy importante para la percepción y además debemos tener en cuenta que los niños pequeños no entienden la ironía.
- La velocidad al hablar: El ritmo que marquemos a la hora de hablar puede transmitir ansiedad si lo aceleramos mucho y eso puede trasladar nerviosismo a quien está recibiendo el mensaje.
- El volumen de nuestra voz: Cuando elevamos la voz nuestros mensaje se puede percibir como una amenaza.
- Los silencios: Darle pausas a nuestro mensaje puede dar más intensidad a nuestras palabras y además da la oportunidad a la otra persona para pensar sobre lo que se está hablando.
- Contacto físico y visual: El contacto físico ayuda a que se establezca una cercanía y el visual traslada el mensaje de que en ese momento no hay nada más importante que lo que estamos hablando. Mirar directamente a los ojos traslada a la otra persona que tenemos el 100% de nuestros sentidos puestos en ella.
Estos elementos también son importantes que los tengamos en cuenta a la hora de escuchar a nuestros hijos. Debemos escuchar todo lo que nos está diciendo su cuerpo, no solo lo que expresa con palabras porque los niños también expresan mucho más con su comunicación no verbal. Escuchar más allá de las palabras nos hará ver en el comportamiento de nuestro hijo una necesidad que no tiene cubierta. Y trasladar a nuestros hijos que nos importa lo que nos está contando y que tenemos una verdadera escucha activa. En este caso es muy importante el contacto visual y la proximidad para que nuestra comunicación no verbal también le transmita que les escuchamos. Elisa Molina de @educarencalma explica esto de una forma maravillosa en su post Escuchar con los ojos.
¿Para qué puede servirnos la comunicación no verbal?
- Apoyar a nuestras palabras: Cuando estamos dando palabras de aliento a nuestros hijo podemos acompañarlo de un abrazo o de una mirada de «se que puedes» y de esta forma reforzamos mucho más el mensaje que queremos transmitirlo. Igual que cuando han tomado una mala decisión el hecho de que el tono de nuestra voz sea relajado y tranquilo ayudará a que el niño no sienta como una amenaza nuestras palabras.
- Expresar sentimientos y emociones: Nuestro cuerpo habla y debemos tenerlo presente para cuando, por ejemplo, necesitemos tomarnos un minuto ante un determinado comportamiento. No pienses que solo con «tragarte» las palabras que ibas a decir es suficiente… Debes tomarte el tiempo que necesites para relajarte y tranquilizarte de verdad, sino tu comunicación no verbal te delatará 😉
- Orientar la interpretación de lo que queremos decir: En ocasiones las palabras pueden resultar ambiguas y la interpretación de cada uno puede ser diferente. En este caso nos podemos servir del lenguaje no verbal para orientar nuestro mensaje hacia como queremos que lo interprete la otra persona.
- Regula nuestra comunicación: También podemos utilizar esta comunicación no verbal para dar más énfasis a nuestras palabras y así trasladar el mensaje de una forma más potente.
- Puede sustituir palabras: Hay ocasiones en los que no sabemos que decir a nuestros hijos y comenzamos a hablar y hablar pero sin tener claro que es lo que queremos trasladarles… En estas ocasiones, en las que por ejemplo no sabemos como consolar a nuestro hijo, lo mejor es que nos quedemos callados, estemos a su lado expresando con nuestros actos que les entendemos y acompañándoles en el proceso. Muchas veces las palabras sobran y nuestro única presencia es suficiente.
¿Cómo podemos trabajar la comunicación no verbal con nuestros hijos?
Como hemos visto podemos comunicarnos con nuestros hijos no solo con las palabras. Ahora vamos a ver de que forma podemos trabajar con ellos esta forma de comunicación:
- Acercarte y ponerte a su altura: Cuanto más cerca estemos más fácil les resultará ver nuestros gestos. Si nos ponemos a su misma altura podrán observar nuestras expresiones y microexpresiones faciales. Los niños aprender del ejemplo y por imitación, si ven nuestros gestos y los asocian a lo que queremos transmitir ellos también podrán hacerlo.
- Responder a su comunicación no verbal: Entablar una conversación sin decir ni una sola palabra, es decir, que nuestra respuesta sean expresiones a la comunicación no verbal del pequeño.
- Ser consciente de la que tu realizas: Tomar consciencia de como es tu comunicación no verbal y de todo lo que expresas con ella. Que tu la conozcas y sepas como debes utilizarla hará que tu hijo tenga un modelo para aprender.
- Decidir la misma frase con diferente tono: Jugar a adivinar que sentimiento estamos expresando solo por el tono de nuestra voz.
- Adivinar solo con la mímica una emoción o sentimiento: Utilizar la mímica para representar diferentes emociones y sentimientos, es una buena manera de tomar consciencia de como utilizamos nuestra comunicación no verbal.
La comunicación no verbal es muy importante en los niños. Hasta que no desarrollan y asientan el lenguaje es su principal forma de comunicación. Si la trabajamos con ellos y conocemos como la utiliza cada uno les estaremos dando mayor seguridad. Además podremos dejar de dar mensajes equivocados y no coherentes entre lo que decimos y lo que transmitimos.
Post del blog
El respeto es una pieza clave en la relación con nuestros hijos
Cuando hablamos de una buena convivencia, de vivir en sociedad o de relacionarnos con los demás la palabra que quizá más utilizamos es RESPETO. Para poder tener una relación de amistad, de pareja o simplemente de compañeros es necesario que ambas personas se respeten y escuchen. Pero cuando hablamos de los niños parece que esa Seguir leyendo
Hacer los deberes con los niños: Por qué no debemos hacerlo
Cuando nuestros hijos inician primaria llega el momento de comenzar a hacer deberes y es un tema que suscita numerosos conflictos. Pasamos de un ambiente en donde el juego es el principal motor de aprendizaje a unas aulas donde nuestros hijos deben responsabilizarse de sus obligaciones. Creemos que los niños necesitan tenernos al lado para Seguir leyendo
Beneficios del porteo, qué es y por qué es lo más recomendable
Cada vez son más los especialistas en crianza que recomiendan portear. Los beneficios del porteo son tanto para el adulto que lo realiza como para el bebé. Pero es importante que sepamos qué es el porteo y cómo se debe realizar de forma segura. Como muchas veces hemos comentado la crianza tiene mucho de sentido Seguir leyendo
Como hacer una mudanza con niños: Consejos prácticos
Las mudanzas trastocan la vida y suelen ir asociadas a agobios. Son muchas cosas las que hay que mover en un periodo de tiempo muy corto. Cuando a esa ecuación además le sumas niños la angustia suele verse multiplicada. Una mudanza con niños es más complicadas porque queremos tratar de que sus rutinas y necesidades Seguir leyendo
Dedicarse a ser MADRE es una decisión que toman muchas mujeres
Os acordáis cuando teníamos veintitantos años y la frase estrella era ¿estudias o trabajas? Pues bien, varios años después esa cuestión cambió por un ¿a qué te dedicas? La respuesta más común es describir las habilidades laborales que desarrollamos. Normalmente tratamos de poner en valor aquello que hacemos a diario en nuestro puesto de trabajo. Seguir leyendo
La angustia por separación: Qué es y qué hacemos con ella
Entre los 8 y los 12 meses aparece en los bebés la denominada angustia por separación. No es otra cosa que no querer irse con otras personas que no sean sus padres o sus cuidadores de referencia. Es algo absolutamente normal y que de hecho evidencia que hemos desarrollado un vínculo afectivo fuerte y sano Seguir leyendo
Colecho: Opciones, beneficios y como hacerlo de forma segura
El colecho es la práctica de que los padres y el bebé duerman juntos y son muchos los beneficios que tiene tanto para el bebé como para sus progenitores. Cuando nació mi hija mayor compre una cuna de colecho pensando únicamente en las tomas nocturnas y en la comodidad que supondría tenerla cerca. Después me Seguir leyendo
¿Debemos criar hijos obedientes?, ¿no será mejor colaboradores?
Uno de los grandes retos cuando tienes hijos es la forma en la que quieres educarlos. Son muchas las dudas que te asaltan y la presión social de «cómo se debe educar» no nos ayuda. La obediencia es uno de los puntos clave. La etiqueta de «niño obediente» es una de las grandes aspiraciones de Seguir leyendo
¿Por qué los bebés tienen que tomar vitamina D?
Cuando te convierte en madre son muchas las dudas que te asaltan. En la primera visita al pediatra (a los 7 días de vida de tu bebé) te darán las primeras indicaciones y recomendaciones, entre ellas te dirán que debes darle vitamina D. Pero, ¿por qué los bebés tienen que tomar vitamina D? Vamos a Seguir leyendo