¿Por qué los bebés tienen que tomar vitamina D?

Cuando te convierte en madre son muchas las dudas que te asaltan. En la primera visita al pediatra (a los 7 días de vida de tu bebé) te darán las primeras indicaciones y recomendaciones, entre ellas te dirán que debes darle vitamina D. Pero, ¿por qué los bebés tienen que tomar vitamina D? Vamos a ver que aporta esta vitamina y porque es necesario que nuestros pequeños la tomen desde que nacen.

¿Qué es la vitamina D?

La vitamina D es un nutriente cuyo cometido es absorber el calcio y el fósforo, ambos fundamentales para el desarrollo y la formación de los huesos. La única manera de obtener de una forma natural esta vitamina es a través de la exposición al sol y la dieta. En caso de que exista una deficiencia o no podamos obtenerlas por estas vías se debe tomar un suplemento de vitamina D para conseguir los índices de ingesta recomendados. La vitamina D también tiene un papel fundamental en mantener el corazón sano y en luchar contra las infecciones.

¿Por qué deben los bebés tomar vitamina D?

Cuando llegas a la primera revisión con el pediatra y te pautan que tu hijo tiene que tomar un suplemento de vitamina D hay muchas madres que se quedan extrañadas. ¿Cómo puede ser que recién nacido ya andemos con suplementos? Bien, como hemos visto la vitamina D únicamente se obtiene de la exposición al sol y de la dieta y ambas cosas un recién nacido carece de ellas.

Los bebés deben recibir luz solar pero nunca se les debe exponer directamente al sol. Su piel es muy delicada y hasta los 6 meses no se recomienda la utilización de ninguna crema de protección solar. Y por lo que respecta a la dieta, los recién nacidos, y también hasta los seis meses, su única alimentación es la leche, bien sea materna o artificial. Por lo tanto, la principal razón por la que los bebés deben tomar suplemento de vitamina D es porque no tienen otra manera de absorber esta vitamina.

¿A qué ayuda la ingesta de vitamina D?

Los huesos de los recién nacidos son muy delicados y flexibles y poco a poco irán cogiendo fuerza. En el proceso del parto los huesos del cráneo del bebé se superponen para facilitar el nacimiento y una vez fuera del útero de la madre esa superposición desaparece. Al desaparecer la superposición, los huesos del cráneo se quedan ligeramente abiertos y el suplemento de vitamina D ayuda a que estos huesos terminen de cerrar.

Como decíamos esta vitamina también es importante para luchar contra las infecciones. Pensemos que los recién nacidos no tienen desarrollado el sistema inmunológico. Es importante que les ayudemos a evitar infecciones y a que su cuerpo tenga herramientas con las que luchar en el que caso de que desarrolle alguna.

¿Hasta cuándo tienen que tomar los bebés la vitamina D?

En cuanto al tiempo recomendado de ingesta, normalmente suele ser hasta que cumplen el primer año de vida. En esa edad ya está bien instaurada la alimentación y el niño puede recibir la vitamina D a través de los alimentos. También puede tener cierta exposición al sol (siempre con protección, tratando de evitar las horas más perjudiciales y controlando la cantidad de tiempo).

A pesar de que lo normal es que en la revisión del año se recomiende dejar de dar al bebé vitamina D, cada niño es diferente y el pediatra tendrá que valorarlo. Como referencia verá como se encuentran los huesos del cráneo del bebé. En mi caso, por ejemplo, mi hija mayor tomó la vitamina D hasta los 18 meses mientras que a mi hijo pequeño a los 12 se la quitaron. Es importante que sea el pediatra quien haga esa valoración y que sigamos sus pautas. Como hemos visto la ingesta de vitamina D es importante para el correcto desarrollo de los huesos de nuestros hijos.

Alimentos ricos en vitamina D

A partir de los seis meses los niños comienza con la alimentación complementaria. Desde ese momento cuentan con una nueva fuente de ingresos de vitamina D. Hay alimentos que cuentan con esta vitamina de forma natural, aunque cada vez más el mercado enriquece con vitamina D determinados alimentos, como por ejemplo los lácteos. Cuanto más naturales y menos procesados sean los alimentos que les ofrecemos a nuestros hijos mejor. Te dejo un listado de los alimentos que cuenta con vitamina D de forma natural:

  • Pescados azules y grasos (caballa, salmón, atún, sardinas…)
  • Aceites de pescados
  • Mariscos (ostras, gambas, langostinos, almejas…)
  • Hígado vacuno
  • Yema de huevo
  • Quesos grasos
  • Champiñones (las setas en general cuentan con ella)
  • Frutos secos (semillas de girasol, almendras, semillas lino, nueces…)
  • El aguacate (aunque existen algunos estudios que ponen en duda que sea una fuente de vitamina D)
  • Algunos cereales, como el germén de trigo (aunque igual que con el aguacate hay estudios que lo dudan)

La vitamina D se encuentra en la grasa de los alimentos, ya que es liposoluble. Es importante que a la hora de ofrecer los alimentos a los niños tengamos en cuenta ofrecer grasas saludables a los pequeños. La dieta debe ser rica, completa y equilibrada.

Os dejo un post de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en donde habla sobre la administración suplementaria de vitamina D al lactante.

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